Nuevos ataques de aviones no tripulados de Estados Unidos en las provincias paquistaníes de Waziristán del Norte y Warizistán del Sur dejaron al menos 40 personas muertas y otras 15 heridas en las últimas horas.
Las aeronaves teledirigidas de Estados Unidos lanzaron un primer ataque con misiles en Waziristán del Norte contra una camioneta y poco después contra una vivienda en la zona de Datta Khel, que acabó con la vida de 25 personas e hirió a otras 10.
Miembros de las tribus semiautónomas radicadas en Waziristán del Norte confirmaron a la televisión local que un avión no tripulado disparó dos cohetes contra un vehículo en tránsito en Datta Khel, hacia la frontera paquistaní con Afganistán.
Entretanto, en Waziristán del Sur, también en una zona fronteriza con Afganistán, otro drone estadounidense disparó contra los ocupantes de otro vehículo y mató a seis de ellos y dejó a cinco heridos, todos de gravedad.
El pasado lunes, un número indeterminado de drones dejó caer su carga sobre una casa en Waziristán del Norte y causó 25 víctimas mortales y 10 heridos cuyas vidas corren serio peligro.
Informes llegados a Pakistán indican que aviones teledirigidos estadounidenses vuelan sistemáticamente sobre las dos provincias, lo que mantiene en permanente estado de sigilo a las comunidades tribales asentadas en la zona.
Pakistán considera que los ataques de los drones son contraproducentes porque contribuyen a exacerbar el sentimiento antiestadounidense entre la población local.
El pasado domingo, en medio de un clima de palmario desentendimiento entre Washington e Islamabad, el primer ministro paquistaní, Yousuf Raza Gilani, reiteró su disgusto por este tipo de operaciones.
“Que nadie espere de nosotros, como de los gobernantes del pasado, que diremos Si, jefe a los Estados Unidos, ni que nos plegaremos a ninguna presión externa, pues no vamos a ir contra los intereses de Pakistán ”, subrayó.
Las relaciones Pakistán-Estados Unidos se han resentido sensiblemente tras la operación encubierta norteamericana que culminó con el asesinato de Osama bin Laden en la ciudad-guarnición de Abbottabad el 2 de mayo último.
Los mandos militares y la mayoría de la población paquistaní consideraron a la inconsulta maniobra una humillación a la soberanía nacional.
FUENTE: YVKE
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